Clubes: negocio placentero
La acción en un club puede costar entre 38 mil y 400 mil bolívares fuertes, más el pago de las cuotas de mantenimiento que, en promedio, se ubican sobre 300 y 1.500 bolívares mensuales. Sin embargo, son una excelente inversión para la clase media profesional, pues en los últimos cinco años su revalorización ha sido de 500 por ciento.
Hoy en día, ser miembro de un club trae mayores beneficios, pues no solo es una inversión que continuamente se revalúa, sino también una alternativa recreacional y social para el propietario y su familia, especialmente durante los fines de semana y las temporadas vacacionales.
Adquirir una acción de un club depende del bolsillo y las preferencias del interesado, así como de los servicios, comodidades y ventajas que espera recibir.
Aunque la tendencia es buscar un club cercano a la zona de residencia o bien con cabañas, en general, cualquier alternativa de club recreacional vale la pena como inversión. La continua revalorización de las acciones, producto de la inflación y la baja rotación del limitado número de afiliaciones, garantiza a sus propietarios un promisorio negocio en el corto plazo, toda vez que le permite aprovechar instalaciones de calidad, cuyo disfrute es más oneroso fuera de estos círculos.
Los clubes privados persiguen ofrecer a sus miembros actividades recreacionales, deportivas y culturales, apoyándose en programaciones (diarias, para fines de semana o temporadas de vacaciones) que buscan hacer partícipe a los diversos públicos que conforman su universo de socios, independientemente de la edad o disciplinas que practiquen.
Con la finalidad de la integración familiar y el intercambio por medio de actividades grupales, dentro de los clubes se fomenta la participación "en equipo" a través de eventos, competencias, torneos, concursos, desfiles y campamentos, los cuales se llevan a cabo en las áreas comunes del recinto. En consecuencia, y dependiendo de la gama de actividades que facilite su infraestructura y ubicación, los precios de la acción en los distintos clubes se cotizan en un mercado de alta demanda y muy poca oferta, donde la relación costo-beneficio permite la selección de acuerdo con los ingresos económicos y preferencias de cada quien, el público que actualmente opta por esta forma de inversión tiene un perfil bien definido: parejas de profesionales de clase media alta (universitarios, empresarios e industriales), cuyas edades oscilan entre 30 y 40 años, y tienen 2 ó 3 hijos pequeños".
En Venezuela existen cerca de 150 clubes, que se clasifican según su ubicación y fines en las siguientes categorías: de montaña, de playa, de ciudad, militares, fraternales, de servicios, universitarios, de empresas y profesionales.
La mayor parte de ellos (80 por ciento) está en Caracas y el área metropolitana, y los restantes en los estados Aragua, Miranda, el litoral central y barlovento, así como el oriente del país.
Por otra parte, hay que considerar que los clubes fraternales agrupan a las colonias extranjeras radicadas en el territorio, que a su vez están representadas por federaciones, como ocurre con las de centros italianos y españoles. Asimismo, están los clubes de servicios, profesionales, empresariales, universitarios y militares, que limitan su membrecía, debido a que pertenecen a gremios, empresas, centros de estudios o grupos específicos.
Aprovechar mejor el dinero.
Hoy en día los clubes son una valiosa oportunidad de negocio, pues los servicios que ofrecen a veces resultan hasta siete veces más económicos que fuera de ellos. Las reservaciones pueden hacerse por períodos de fines de semana, quince días o un mes, dependiendo de la demanda y número de socios de cada centro, también se reducen los gastos de diversión familiar, no solo por tener todo condensado en un mismo espacio, sino porque los clubes brindan programaciones especiales en temporadas, que bajan los costos de entretenimiento y son una buena opción para la época de vacaciones.
Valle Arriba Golf Club ha resultado una inversión interesante, porque mientras la inflación estuvo cerca de 30 por ciento, la acción del club se revaluó en 200 por ciento durante los últimos doce meses.
La acción de un club es el único instrumento que además de rendimiento brinda satisfacción personal, pues no se devalúa y se disfruta mientras se gana y, evidentemente, el título cada vez estará más caro dentro del mercado, porque como es un inmueble moderno, con una ubicación privilegiada en una zona residencial de la capital, es insustituible, porque ya no quedan terrenos en Caracas para este tipo de construcciones.
Creo que ir a un club social es una interesante opción para invertir, si se tiene una familia es un excelente lugar de esparcimiento y entretenimiento seguro y que se adaptan a las necesidades de cualquier individuo de una familia, pero también es una excelente manera de invertir dinero que se puede revalorizar con el pasar del tiempo y de la situación que se esté viviendo.
ResponderEliminary sobre todo en el aspecto de seguridad, que no tiene precio, y que la familia de uno bien lo vale
ResponderEliminarExcelente publicación!
ResponderEliminarLas ciudades venezolanas tiene muy pocos o casi ningunos espacios de esparcimiento, producto de la mala urbanización de las ciudades en nuestro país. Es por eso que para la clase media de las grandes ciudades con esa limitante, combinado con el problema de la inseguridad ha optado por invertir en clubes sociales, que hoy en día es casi una necesidad si se quiere tener un lugar donde esparcirte y despejarse de las agobiantes ciudades. Es por esto que en mi opinión este tipo de inversiones valen la pena, sobre todo en un país como Venezuela.
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